con qué brindan los militares

….cuando tienen algún motivo para brindar:

con el brindis de los tercios viejos que inmortalizó Lope de Vega:

POR ESPAÑA, Y EL QUE QUIERA

DEFENDERLA,  HONRADO MUERA

Y EL TRAIDOR QUE LA ABANDONE

NO TENGA QUIEN LE PERDONE,

NI EN TIERRA SANTA COBIJO,

NI UNA CRUZ EN SUS DESPOJOS

NI LAS MANOS DE UN BUEN HIJO

PARA CERRARLE LOS OJOS.

 y con vino:

con qué brindan los militares

lo mires por donde lo mires

En estos momentos de indignación ante el terror de los asesinatos en París, es necesario más que nunca no caer en la trampa de la generalización y por eso traigo esta imagen tomada en el año 1991 en la Operación de ayuda al Kurdistán,  en la que un paracaidista español de la Bandera Roger de Flor y un paisano kurdo se regalan una sonrisa mientras se saludan estrechando  sus manos.

lo mires por donde lo mires

Pascua Militar

Epifanía de Nuestro Señor del Año 1782

 Como expresión de júbilo por la recuperación de Menorca del poder de los Ingleses y de regocijo por las ilusionadas esperanzas, nacidas de las gestiones por aquel entonces realizadas, de recuperar el Peñón de Gibraltar, la Majestad de Carlos III, Rey de las Españas queriendo dar al Ejército de España y de sus Indias, una muestra de su Real aprecio, ordenó a los Virreyes, Capitanes Generales, Gobernadores y Comandantes Militares que, en la Festividad de la Adoración de los Santos Reyes Magos, reuniesen a las guarniciones y presidios y notificasen en su nombre a los Jefes y Oficiales de los Ejércitos, para que estos lo hiciesen llegar después a las Tropas, su regia felicitación con ocasión de la fiesta que debería celebrarse todos los años en tal fecha, y llamarse en lo sucesivo: PASCUA MILITAR.

 PUERTO DE MAHON Y CASTILLO DE SAN FELIPE La reconquista de Menorca (19-8-1781 a  5-2-1782) fue un enfrentamiento bélico entre tropas británicas y una coalición de españolas y francesas, con victoria de las segundas, por el control de la Isla de Menorca, durante la Guerra de Independencia de los Estados Unidos. Anteriormente, España y Francia habían renovado el Tercer Pacto de Familia mediante el Tratado de Aranjuez, a raíz del cual la primera intervendría en la Guerra de Independencia de los Estados Unidos junto a la segunda, que ya estaba inmersa en este conflicto contra Gran Bretaña. Uno de los puntos de dicho acuerdo establecía la cooperación militar de los dos reinos para la recuperación de la soberanía española sobre la Isla de Menorca, que estaba en poder británico desde 1763 en virtud del Tratado de París, pues para Inglaterra, el dominio sobre la isla de Menorca y en concreto las características naturales de la bahía de Mahón, tenían el mayor valor estratégico para el control del Mediterráneo.

El reinado de Carlos III (1760- 1788) se caracterizó por una incesante actividad bélica: asedio y bloqueo para la reconquista de Gibraltar, defensas de las plazas norteafricanas de Ceuta y de Melilla ante los asedios de los moros, la operación de socorro de Argel, las expediciones a Sacramento –en la Banda Oriental o Uruguay- contra los portugueses y a la Florida para ayudar a la independencia de las colonias británicas norteamericanas, y la participación en la Guerra de los 7 años a raíz de la pérdida de La Habana y Manila ante los británicos, y la misma de reconquista de Menorca, entre otras quizá no tan importantes.

Libro de Ordenanzas de carlo iii Carlos III fue el autor de la  institucionalización de los Ejércitos, una muestra más de ello es  la promulgación de las Reales Ordenanzas que suponen una guía de comportamiento preñada de los más altos valores morales y prácticos para la organización militar. Reproduzco a continuación el artículo 5º del cabo que, después de producirnos una sonrisa podemos analizar en profundidad y comprender su verdadero alcance:

“El Cabo, como Gefe más inmediato del Soldado, se hará querer, y respetar de él, no le disimulará jamás las faltas de subordinación; infundirá en los de su Esquadra amor en el oficio, y mucha exactitud en el desempeño de sus obligaciones; será firme en el mando, graciable en lo que pueda, castigará sin cólera, y será medido en sus palabras, aun quando reprenda.”